¿Qué es un Depredador?

Definición

Antes de definir el término “depredador“, es importante explicar su origen etimológico. Esta palabra se compone de las siguientes partes:

– El prefijo “de-“, que indica dirección de arriba hacia abajo.
– El sustantivo “praeda“, que se traduce como “presa“.
– El sufijo “-tor“, que equivale a “agente“.

Depredador es un adjetivo que describe a alguien que depreda. El verbo depredar, por su parte, en el caso de los animales, significa cazar individuos de otra especie para sobrevivir, como una estrategia de supervivencia y método de alimentación. En este sentido, la depredación es una relación en la cual los individuos de una especie (depredador) cazan a individuos de otra especie (presa) para sobrevivir, causando siempre un impacto negativo en los individuos que cumplen el rol de presa, como la muerte o heridas.

Función

Ahora bien, desde la perspectiva de la Psicología en su estudio de la Personalidad, para el eminente Dr. Theodore Millon, la función de la misma consistiría en las siguientes tareas:

Preservar la vida: Evitar daño-Potenciar placer. Sobrevivir es la primer ‘tarea’ de cualquier organismo, para lo cual son imprescindibles dos estrategias: (a) alcanzar la existencia (potenciar el placer), promover el bienestar y la competencia; y (b) preservarla (evitar el daño y el peligro)…
Adaptarse: Modificar activamente el entorno-Acomodarse pasivamente. Implica el intercambio de energía con el entorno, manteniéndose único y diferenciado… La normalidad es un equilibrio flexible y delicado de su urso: es adaptativo explorar o luchar, pero hay momentos en los que lo adaptativo es esconderse. Un individuo con alta modificación activa del entorno se caracteriza por tener vigor, energía, alerta, búsqueda de estímulos y cierto grado de temeridad e impulsividad…
Reproducirse: Sí mismo-Otros. La tercera tarea evolutiva para cualquier organismo es garantizar la subsistencia de sus genes. Los biólogos describen dos estrategias reproductivas: la ‘r’ (centrados en sí mismos: reproducir muchos descendientes y abandonarlos a su suerte) y la ‘k’ (centrados en los otros: tener pocos descendientes, pero cuidarlos con esmero). Ambas son necesarias: hacen falta individuos con capacidad de “r” para que sobreviva el grupo y el infante humano no sobrevive sin los cuidados de una persona con capacidad de “k”. Los individuos que tiene alta capacidad para otros suelen ser protectores, preocupados, considerados, altruistas, sensibles, empáticos, capaces de comunicar e intimar y, por lo tanto, suelen ser buenas figuras de apego para un bebé…
Casas et al., 2015, p.149-150.

Por lo tanto, la personalidad tiene como función afrontar diversas tareas primordiales de la vida, a saber: Preservar la vida, Adaptarse al Entorno, Reproducirse.

Estrategia

Tal como hemos visto anteriormente, si la función de la personalidad es afrontar las tres tareas primordiales de la vida, la pregunta es “¿cómo hace o de qué manera hace la personalidad para llevar a cabo esta función?”. En referencia a ellas, el Foro Gallego para el Estudio de la Personalidad nos la explica de la siguiente forma:

La función de todos los sistemas descritos es afrontar las tareas de la vida: Identidad, Intimidad y Conducta Prosocial, mediante dos estrategias básicas: dominar o nutrir. Todos los modelos presentados en los capítulos previos comparten al menos dos dominios para describir, explorar y clasificar la personalidad y los trastornos de personalidad: Agencia y Afiliación.
Agencia: capacidad de actuar sobre el entorno (físico y humano), dominante y activo desde la infancia, vigoroso y enérgico, con poco miedo y poca ansiedad, tendencia a luchar antes que huir, alta búsqueda de Novedad (TCI-r), alta Extraversión activa (NEO-PI-r) y alta Extraversión (Kernberg).
Afiliación: capacidad de implicación emocional genuina, benevolente y sensible desde la infancia, nutricio, altruista y emotivo, tiende a la aproximación, disfruta de la interacción humana, tiene un apego más seguro, es capaz de funcionar como figura de apego, alta Cooperación y Dependencia de Recompensa (TCI-r). alta Afabilidad (NEO-PI-r) y NOP alto (Kernberg).
Casas et al., 2015, p.148.

Por lo tanto, las tareas primordiales de la vida son afrontadas a través de dos estrategias básicas denominadas capacidades adaptativas: la modificación activa/pasiva (ACT/PAS) del entorno y centrado en sí mismo/en los demás (SELF/OTROS).

Estilos Adaptativos Sanos y Patológicos

También nos aclara que dichas “capacidades adaptativas” son desarrollados tanto por personas sanas como por aquellas que padecen de algún tipo de psicopatología, formando un estilo adaptativo:

… Cualquier persona, con o sin trastorno de personalidad, utiliza, en diferentes momentos y entornos, algún estilo adaptativo. Las personalidades “sanas” utilizan con flexibilidad y eficacia ambos polos de cada capacidad, según el ambiente y el momento. Los estilos adaptativos son estrategias evolutivas útiles ante situaciones específicas, por lo cual están presentes en todos los individuos sin que ello implique patología de la personalidad: el repliegue pasivo ante una catástrofe inevitable (estilo Ausente), la agresividad e imprudencia temeraria para salvar la vida de un ser querido (estilo Predador), la seducción en la docencia o en la política (estilo Teatral), y la cooperación y obediencia en una tarea en equipo (estilo Sumiso). Y sin llegar a extremos de situaciones límite, los estilos son parte “natural” del estilo idiosincrático de cada individuo. Lo patológico es el uso estereotipado, rígido e invasor, más allá de la situación. Los trastornos de personalidad se caracterizan por tener rigidez para cambiar de polaridad y por valores extremos en algún polo. Por otra parte, es frecuente que un estilo manifiesto oculte (generalmente para compensar) a un estilo más auténtico: por ejemplo, el narcisista encubierto tiene una conducta de aparente inhibición, respeto y sumisión, que oculta la sensación de sentirse único y especial.
Casas et al., 2015, p.152.

En otras palabras, los “estilos adaptativos” formarían un continuum que comenzaría en un extremo con las personas más sanas, hasta terminar en el otro extremo, con las personas más patológicas, definidas por su uso estereotipado y rígido.

Trastornos de Personalidad

Respecto a este último grupo, el Foro Gallego para el Estudio de la Personalidad nos dice que, si distribuimos los Trastornos de Personalidad con las dos estrategias de adaptación, obtendremos el siguiente cuadro de estilos adaptativos:

Hay dos polos de capacidades adaptativas que correlacionan con la mayoría de los modelos de personalidad: Modificación activa del entorno (ACT) y Centrado en los Otros (OTROS). Si distribuimos los Trastornos de Personalidad en esas dos dimensiones a partir de los valores discretos que Millon les adjudica, se obtiene una taxonomía basada en capacidades adaptativas en la cual los Trastornos de Personalidad se dispersan desde el centro hacia cuatro polos que denominaremos “estilos adaptativos”: Predador (Activo centrado en sí mismo, Trastorno de Personalidad Antisocial), Teatral (Activo centrado en los otros, Trastorno de Personalidad Histriónico), Ausente (Pasivo centrados en sí mismo, Trastorno de Personalidad Esquizotípico), Sumiso (Pasivo centrado en los otros, Trastorno de Personalidad Dependiente), Inestable (Mediana capacidad en los 4 polos, Trastorno de Personalidad Límite).
Casas et al., 2015, p.150.

¿Cómo se comporta un depredador?

Es aquí donde aparece el estilo adaptativo cuyos autores denominan: estilo PREDADOR. El mismo tiene como estrategia de supervivencia la Modificación activa del entorno (ACT) y Centrado en sí mismo (SELF).